Tlaxcala en los últimos dos ciclos olímpicos ha tenido mínima participación en el proceso cuatrienal; la herencia de un mal trabajo en los gobiernos priístas de Mariano González Zarur y Marco Antonio Mena Rodríguez, afectó la continuidad de acciones concretas para que la entidad tuviera atletas en la élite del deporte nacional e internacional.
Sumado a ello, el divisionismo y nulo programa de asociaciones estatales nos alejó de estar entre los mejores de México en disciplinas como el atletismo y el boxeo, los deportes que históricamente han trascendido fuera de las fronteras locales y lasnacionales.
Ante este panorama, con excepción del pugilista Daniel Sosa Guerra, no se ve por dónde pudiera Tlaxcala tener exponentes de alto nivel en el ciclo actual, que tendrá en 2023 Juegos Panamericanos y en 2024 Olímpicos.
Ante este panorama es urgente que el Instituto del Deporte de Tlaxcala dé un giro y cambie el rumbo, para eso su labor debe concentrarla en proyectar a los mejores talentos, los que han madurado en su etapa juvenil y abrir espacios de fogueo, darles seguimiento y hacerles ver que su nivel está orientado al alto rendimiento.
Claro que eso implica inversión económica, por lo que Madaí Pérez Carrillo, quien está al frente de la dependencia estatal, debe buscar apoyo de la iniciativa privada y no limitarse y declinar al impulso con el pretexto de que no hay recursos.
LEONARDO DE JESÚS
Hoy día, el atleta sobre silla de ruedas, Leonardo de Jesús Pérez Juárez, es el mejor tlaxcalteca en su categoría, y es motivo de admiración su hambre de triunfo en la madurez de su carrera deportiva.
El múltiple ganador del Premio Estatal del Deporte se muestra decidido a subir al podio en París 2024 y hacerlo en la cima, por lo que darle el respaldo necesario es obligatorio para que alcance sus metas para bien del deporte tlaxcalteca.
Atrás de él empuja fuerte Fernando Sánchez Nava, quien entrena a conciencia con la mira en llegar a la justa universal, a disputarse en Francia.
DEPORTE CONVENCIONAL
En el deporte convencional, Tlaxcala no tiene corredores pedestres ni boxeadores con el nivel para disputar clasificatorios rumbo a Panamericanos y Olímpicos. Este tema debe ser analizado a fondo por Madaí Pérez Carrillo y no dejarlo a la deriva.
Clubes, entrenadores y asociaciones deben ponerse a trabajar y dar resultados, el tiempo transcurre, por lo que hay que ser contundentes con programas y actos, dirigidos a captar y desarrollar promesas deportivas.
Recordemos que formar grandes deportistas no es de un día a otro; al menos dos años son necesarios para pulir la técnica y capacidades de quienes tienen la posibilidad de crecer en su disciplina.
No borremos del mapa al ciclismo, que tiene a tlaxcaltecas en vueltas nacionales e internacionales, por ahí está Miguel Arroyo Rosario, quien puede desarrollar los alcances de su padre, el extinto Miguel Arroyo Rosales, que así sea.
